¡Prepárese para una serie de aventuras divertidas y recuerdos llenos de adrenalina que durarán toda la vida!
Montar a Caballo
Imagínese montando a caballo por el bosque costarricense y haciéndolo en una zona conocida por sus senderos para hacerlo. Este paseo dura aproximadamente 45 minutos y podrá ver plantas y flores nativas alrededor del Volcán Rincón de la Vieja. El volcán, es el más grande del noroeste de Costa Rica. Disfrute de la flor nacional, la orquídea, y tal vez podrá ver una variedad de aves y monos que habitan el área alrededor del volcán.
Canopy
El canopy es una manera emocionante de experimentar el entorno que lo rodea. No solo pasará de plataforma en plataforma a través del bosque, sino que también cruzará puentes colgantes, escalará rocas, rappel y esperará su turno en los columpios estilo Tarzán. Este divertido curso le lleva por cañones y por el dosel de árboles. Experimentará la velocidad del canopy por sus ocho diferentes cables, uno de ellos lo llevará a un río de forma rápida.
Tubing por el Río
Cámbiese la ropa de montar y póngase el atuendo para hacer tubing de río. Esta aventura acuática le lleva a lo largo de aproximadamente tres millas del Río Negro. Comenzará por el fondo de la cascada Victoria y serpenteará a lo largo del Río Claro, a veces pasando por retadores rápidos. Los guías acompañarán el viaje para asegurarse de que todos estén bien.
Almuerzo
Después de todas las actividades, su apetito se abra abierto. El almuerzo se sirve en forma de bufé y consta de una variedad de platos principales, acompañamientos, dulces, té, café y zumos de frutas. También hay opciones sin gluten, vegetarianas y veganas.
Baño de Barro y Aguas Termales
Después de un delicioso almuerzo, lo trasladarán a las aguas termales ubicadas en un bosque tropical. Las aguas son calentadas por el Volcán Rincón de la Vieja, y hay diez piscinas diferentes compuestas de aguas minerales cristalinas. Para una experiencia similar a la de un spa, extienda lodo de arcilla volcánica sobre su piel y deje que se seque. Lávese con una ducha hecha con agua de río y luego sumérjase en las aguas termales.