El Remanso Lodge

Si su idea del paraíso es un bungalow aislado en un bosque tropical, reserve su estancia en Costa Rica en El Remanso Lodge en la Península de Osa. En armonía con la naturaleza, la cabaña está casi oculta por el bosque en una reserva de 185 acres. Se encuentra sobre una playa tranquila, ubicada a una hora en vehículo de Puerto Jiménez.

La reserva privada es parte del Refugio Nacional de la Península de Osa, más grande, conocido en todo el mundo por la diversa vida silvestre que se encuentra dentro de sus fronteras vírgenes. El albergue está comprometido con la sostenibilidad y complementa su entorno. Utiliza un sistema de manejo de residuos, trata sus aguas residuales y recicla todo lo que puede. El albergue también genera su propia electricidad con un pequeño sistema hidroeléctrico.

El Remanso es pequeño y operado por el propietario, lo que permite a los miembros del personal darle una estadía personalizada a sus visitantes. Los huéspedes tienen la opción de elegir una habitación en el lodge o una villa o bungalow privado, construido con madera que ha ido cayendo dentro de la reserva. Independientemente del lugar que elija, disfrutará de amplias habitaciones con fantásticas vistas al océano y a la selva. Descanse en una hamaca en la terraza, tome una ducha al aire libre y disfrute del ambiente informal en medio de las vistas y los sonidos de un paraíso tropical que llega hasta sus habitaciones.

Disfrute de comidas gourmet en una mesa privada en el restaurante Lodge, una estructura de bambú elegante con una terraza que da a un cañón del bosque. Las comidas están planificadas para brindarle toda la energía que necesitará para disfrutar de un día lleno de energía, con mariscos frescos, una combinación de opciones locales e internacionales y frutas y verduras frescas. Después de un día activo, salte a la piscina del hotel y tome unas copas en el bar antes de la cena.

El Remanso ofrece una experiencia como ninguna otra, lo que le permite descubrir la emoción de un encuentro privado con la selva. Camine por los senderos de la reserva y descubra tesoros de flora y fauna como ranas de colores brillantes, monos juguetones en el dosel y coloridos y exóticas aves, junto con una variedad de otros animales salvajes. En el camino, descubrirá cascadas y piscinas naturales escondidas en las profundidades de la selva. O puede optar por explorar las lagunas y piscinas de mareas a lo largo de la playa. Hay muchas cosas para deleitarse aquí.